Mural de Alejandra en Ixtapaluca.

Mural de Alejandra en Ixtapaluca

Una muestra de la resistencia de las madres en busca de justicia por los feminicidios de sus hijas en el Estado de México.

Por: Mari lin Martínez García

El pasado lunes 16 de agosto se hizo historia en Ixtapaluca. El arte se llenó de rabia. La pared de una secundaria sirvió para plasmar con colores la furia de una madre. Teresa veía orgullosa lo que logró hacer acompañada de colectivos del oriente del Estado de México y madres de víctimas de feminicidio.

El retrato de Alejandra Calvo, es impresionante. Ella es una pintura hermosa de una mujer que merecía vivir. La policía inepta, los ministerios, las autoridades e incluso el asesino tendrán que pasar algún día por ahí. Este mural es un recordatorio, una forma de exigir justicia. Al mirarlo no puedo evitar pensar en qué pasaría si las calles del oriente del Estado de México se llenaran de murales de rostros de mujeres víctimas de feminicidio. Qué pasaría si en Chalco, Ixtapaluca, Amecameca, Chimalhuacán, Nezahualcóyotl, entre otros municipios, se pintaran los rostros de las mujeres asesinadas por el patriarcado y un sistema de justicia inepto.

Esta crisis de feminicidios no es de estadísticas. Esta crisis está llena de rostros de mujeres, llena de víctimas: madres, abuelas, hijas, hijes e hijos de amigas que se quedan aquí y que lo mínimo que pueden exigir es justicia. Si no la obtienen por parte del Estado estamos las colectivas, las que nos quedamos, las sobrevivientes, las artistas, las fotógrafas, las escritoras, las pintoras. Nosotras estamos dispuestas a pintarlas, para que a ellos no se les olvide que nos deben justicia.

Teresa es del barrio y defiende a las mujeres que en él habitamos. Porque ¡qué creen! ser del barrio ¡no es nada malo! ser una mujer a la que le gusta vivir, tomar, que sale por las noches, no te hace merecedora de ser asesinada brutalmente.

Teresa grita y lucha por todas las mujeres de la periferia, por las que ya no están y por las, les y los familiares de las victimas. Exige que el asesinato de su hija Alejandra Calvo, sucedido el 16 de abril del 2020, no quede impune. Ella no lucha sola, lucha acompañada de otras mamás, mujeres sobrevivientes de atentado de feminicidio y colectivas de la periferia. Lucha de la mano del barrio, de la mano de la comunidad transexual, que la ha acobijado a ella y a su hije, quien que la acompaña en la lucha de justicia por su hermana.

¡Ni perdón ni olvido a los asesinos! ¡Justicia para Lulú y sus cuatro hijxs! Hoy cuidados por su abuela. ¡Justicia para Alejandra! ¡Justicia para Renata! ¡Justicia para Dianey! ¡Justicia para todas las víctimas de feminicidio y transfeminicidios en el Estado de México! ¡Justicia para las mujeres de Ixtapaluca y de los otros once municipios del Estado de México.