#DefenderNuestrasvidasNoEsUnDelito.
La historia de Roxana, la negligencia de las fiscalías y la defensa feminista.
Roxana Fotografía @mari_lin_mtzg
Roxana Ruiz es una joven de 23 años, madre de un pequeño de cuatro años. Originaria de la Pinotepa Nacional, Oaxaca. Migró a Nezahualcóyotl a la edad de 15 años.
Fotografía de @mari_lin_mtzg
El caso de Roxana, por lo que su nombre se menciona en los medios de comunicación, no es la precariedad laboral en la que vivimos las mujeres de la periferia, aunque ella vende papitas en la calle para mantener a su pequeño, sola. Tampoco es el abuso que sufrió de su expareja, lo que la obligó a separarse de él o el hecho de ser víctima de violación y sobreviviente de feminicidio. Ninguna de estas razones fue suficiente para que se hiciera eco de su historia, pues Roxana es conocida porque tuvo la osadía de defenderse.
Fotografía Mari Lin Martínez García @mari_lin_mtzg
Este es un país lleno de inconsistencias e irregularidades a la hora en atrapar y juzgar feminicidas y nombres sobran, el tiempo que tardó Irinea, mamá de Mariana Lima, en tener justicia. La sentencia que se le da hasta ahorita al agresor de Carmen Sánchez. Los nueve meses que recibió como sentencia el asesino de Fátima Quintana, pues él solo tenía 17 años cuando la asesinó en el 2015. El caso de María de Jesús, hija de Yesenia Zamudio. El de Lesvy y Jessica González en el Estado de México, el de Karen, Renata, Liliana. Casos de feminicidio llenos de irregularidades e impunidad hay por montones en este país.
Fotografía @mari_in_mtzg
Pero Roxana es diferente. Ella se defendió. Logró sobrevivir a su agresor y para la fiscalía esto merece un castigo, pues “excedió la legítima defensa”. ¿Qué es exceder la legítima defensa? Para la jueza Mónica Palomino, un golpe habría sido suficiente, pero merece seis años y dos meses de prisión.
Fotografía Mari Lin Martínez García
El mensaje que nos dan a las mujeres no solo del Estado de México, sino del país, es que se defiendan, pero no tanto. Si sobreviven y denuncian a su agresor. Háganlo tomando en cuenta que nosotros somos capaces de dejarlo libre para que regrese a terminar lo que empezó como lo hicieron con Abril Pérez, que había denunciado a su marido, Juan Carlos García, por intento de homicidio en enero del 2019, pero un juez lo dejó en libertad en septiembre del mismo año. O el más conocido doble feminicidio en México, el de Maricela Escobedo, madre de Rubí Marisol Frayre asesinadas por Sergio Barraza quien fue dejado en libertad en múltiples ocasiones por la negligencia de las autoridades.
Fotografía @mari_lin_mtzg
Lo sé, el panorama se pinta turbio para nosotras. Parece que por más que les gritamos a la cara. ¡Basta! ¡Dejen de matarnos! El sistema se pinta cada vez peor si se trata de justicia para las mujeres. Por eso es que las redes de mujeres siguen siendo importantes para nosotras. Las colectivas a las que tampoco debemos romantizar, son un parte aguas dentro de los sistemas estructurados para mantener en la impunidad los abusos, violaciones y asesinatos cometidos hacia nosotras.
Magda y Karla pivadas de su libertad 315 días tras los muros de Santa Martha Fotografía Mari Lin Martínez García
Roxana es un precedente para las mujeres del Estado de México, pero no solo ella, también la lucha en la que se han mantenido las compañeras de “Nos Queremos Vivas Neza” , una lucha que aún no está ganada, pues aunque se declaró el cese de la acusación penal, se siguen dando largas en el caso.
Andrea. Madre de Verónica Zoto, Estudiante de enfermeria,asesinada en Naucalpan Estado de México. El 1 de Noviembre de 2019 @mari_lin_mtzg
El pasado viernes las colectivas del Estado de México marcharon en apoyo a Roxana y a las acompañantes de la región. Juntas desde los municipios de Chimalhuacán, Ecatepec, Nezahualcóyotl, Atlautla, Chalco y Naucalpan. Caminaron de la glorieta de las mujeres que luchan a la Victoria Alada. Seguir en resistencia es lo que queda por ahora. Estar al pendiente de que se haga lo que es justo para ella y su hijo. Seguir acompañando a las colectivas y difundiendo los avances del caso es lo mínimo que podemos hacer para sentar un precedente que beneficie a las mujeres que fueron privadas de su libertad por defender su vida.
Fotografía de Mari Lin Martínez García
Fuentes
