A la entrada de este espacio un afiche enorme dice: ¡Esa idea que tú tienes y que alguien necesita! Nos recibió el pasado 21 de septiembre en su recinto de exposición la Universidad de la Comunicación para dar una charla a razón de la exposición colectiva: Voltear la Cámara. Llenas de nervios, emociones y ganas de compartirnos nos encontramos a la entrada las integrantes de la colectiva Cámara Violeta. Después de un breve intercambio sobre cómo llegamos al lugar, si del trabajo, la casa o la home office, nos fuimos juntando con más energía antes de hacer nuestra entrada al corporativo dos dónde ya nos esperaba un público amable y aplaudidor. Al entrar una de las organizadoras y parte del Comité Feminista de la Universidad nos dijo: ¡Pasenle artistas!
Se siente bien que valoren tu trabajo personas que no conoces, cuándo en ocasiones nos cuesta nombrarnos fotógrafas, se dibuja una sonrisa al escuchar ¡Adelante artistas! Abrirnos este espacio para exponer ha sido parte de nuestros buenos deseos del año, agradecidas con la institución, Guadalupe Gutiérrez de la Carrera de Periodismo, la curaduría a cargo de la carrera de Gestión Cultural, el Rector de la Universidad, y la organización del evento quienes iniciaron con palabras calurosas.
Hablar de nuestra experiencia en la colectiva y de nuestra obra era la consigna. En la alegre apertura de Brenda Martínez Carrera quién desde su forma única y jocosa nos hizo brotar la sonrisa para entrar en la reflexión de nuestro contexto económico violento, su deseo de voltear la cámara para crear autorretratos con las dificultades de una casa que no se siente cómoda para explorar, la habitación propia que no existe como la cuenta el feminismo blanco de la hegemonía. Nuestra mirada, la negada. ¡Importa! cierra su participación.
Los aplausos y la emoción. La voz cálida de Arely describe su quehacer cotidiano, ella se sabe artista, grandiosa. Nos cuenta de dónde viene, su barrio: El Hoyo. Su amor por la docencia, el descubrimiento de su cámara en la Pandemia y la importancia de las amigas. Su florecer a través del reconocer el claro y oscuro de su ser a través de la lente. Los aplausos continúan, las sonrisas, sus palabras resuenan.
Es el turno de Mari Lin Martínez. Inicia diciendo soy madre, soy fotógrafa, soy mujer periférica y soy feminista. Buscando conectar su iniciativa sembró una semilla que sigue dando frutos. Llena de experiencia y gozo por contar las historias de Los Volcanes, resiste y entre lágrimas nos recuerda: -¡esto no hubiera sido posible sin Are, Lila, Jess, Bren, Emi, sin nosotras! Cinco minutos cada participación, hay tanto que decir en tan poco tiempo, pasa la artista Lila Bang Bird, astronauta clandestina, nos cuenta su proceso de mirar hacia dentro, de compartirse con las otras a través de las imágenes, de los distintos feminismos que nos caracterizan, de la importancia de ser manada.
Con la nostalgia en la garganta y el cubrebocas bien puesto, es mi turno. Vengo de la Merced, pero mis experiencias más significativas fueron en la periferia del Estado de México, los largos trayectos, la violencia, intentar sobrevivir. A través de la danza, la fotografía y la escritura comencé a mirarme, e inicié el camino para sanar mis propias dolencias. Voltear La Cámara es ese deseo de compartir este viaje de auto exploración creativa. El cierre de la charla está a cargo de Jessica Piedras, ella nos cuenta de la imposibilidad de mirarse sin fragmentarse, del vivir desde la bipolaridad y de cómo las redes entre mujeres salvan.
La inauguración de la exposición está a unos pasos, cortar el listón, hablar de nuestra obra, interactuar y por supuesto, sacar fotografías del evento. No nos queda más que agradecer y saber que de a poco vamos tejiendo redes colaborativas para encontrar espacios dónde nuestras voces sean escuchadas y nuestras miradas se acerquen a nuevos públicos. Si quieres visitar nuestra exposición Voltear La Cámara alojada en la Universidad de la Comunicación acércate a la institución o bien ponte en contacto con nosotras a través de nuestras redes sociales. ¡Queremos conocerte!