
Mayo es un mes con muchas fiestas, regresamos de recordar nuestra infancia, celebrar además de denunciar que los derechos de las niñas y niños de México existen y están siendo pisoteados ¿Acaso nuestra lucha no es por ellos y ellas, por las nuevas generaciones?
Hoy es Día del Trabajo, una fecha tan tergiversada que ha dejado de ser una lucha por los derechos de los trabajadores y trabajadoras. También es un buen día para reflexionar sobre como las madres, activistas y colectivas están realizando trabajo no remunerado.
Los cuidados han sido tan normalizados que hasta hace unas décadas se comenzó a señalar que las mujeres además de cumplir con horas de trabajo en cualquier lugar por un pago, tienen que regresar a casa para realizar infinidad de actividades que además no son remuneradas.
Activistas de diversas profesiones o sin serlo están realizando búsquedas a lo largo y ancho del país, se han convertido en defensoras de derechos humanos, abogadas y detectives, un trabajo que le corresponde al Estado pero que ellas están haciendo sin pago alguno.
Compañeras no es menos lo que estamos haciendo, es importante, es cansado y debería ser pagado. ¿Por qué menospreciamos nuestras labores? ¿Cómo podemos dejar de explotar a nuestras madres? Dedicarnos a las labores domésticas nos quita energía para dedicarnos a hacer arte ¡Gracias por tu esfuerzo, entereza y pasión porque todo esto es un gran reto!
Brenda Martínez