Diseñadora Industrial
¿Cómo fu tu encuentro con el feminismo?
Tuve un encuentro medio complicado, la verdad es que al principio comencé a ver las marchas y diferentes cosas que hacían las demás chicas y tenía ese conflicto entre si estar o no estar de acuerdo, entonces me pasó lo que ha muchas chicas. Comencé a decir, bueno sí, pero creo que esas no son maneras. Después empecé a analizar un poco eso y fui entendiendo el porqué de muchas cosas, ya fue cuando me empecé a adentra más. De ahí en adelante comencé a leer más cosas que habían escrito otras mujeres, escuchar podcast y me di cuenta de que sus opiniones se parecían mucho a las mías, entonces a todo empezó a tener sentido.
En ese sentido de escuchar y leer a otras mujeres ¿Has encontrado arropo o conexión en el feminismo?
Yo creo que sí, igual lo mismo que les ha pasado a otras chicas que estábamos como en conflicto entre nosotras. Es decir, sí me llevo bien con mujeres, pero mujeres que sean de determinada manera, pero con estas otras mujeres no. Estuve gran parte de mi vida viviendo así. Cuando comencé a entender eso, sin querer empecé a convivir con más chicas, entonces comenzamos a hablar de cosas que nos habían pasado y nos dimos cuenta de que a todas nos había pasado, entonces nació ahí la conexión. En los momentos que estaba triste hablaba con mis amigas y pero también a escuchar más voces de mujeres que se sentían igual que yo, de ahí nació el yo también quiero hacer algo para que mujeres jóvenes se sientan comprendidas por otras mujeres, así como me pasó a mí y mi relación con las demás cambió
¿Cómo vives el feminismo en la cotidianidad?
La verdad siento que influye demasiado. Hasta en las series que veo, ya no puedo ver una serie sin analizarla. Escucho un chiste y ya no me da risa como antes me daba, ahora ya es totalmente diferente para mí, en todo lo que hago, antes decía no quiero comer esto, porque no quiero subir de peso, pero ahora me lo como, porque lo quiero. Son pequeñas cosas que ya veo de otra manera. Desde lo más pequeño se nota mucho y eso escala a las grandes cosas. A mi el feminismo me hizo cambiar mucho. Me hizo sentir más segura.
¿Has tenido desencuentros al asumirte feminista?
Sí, conmigo misma, al preguntarme ¿Por qué hacía esto? ¿Cómo pude hacer esto? ¿Cómo permití esto? Cuando miro hacia atrás y veo todo lo que era. Todavía a veces entro en conflicto. El feminismo me abrió los ojos, ahora veo hacía atrás y pienso: esto que pasó estaba mal y no sabía que estaba mal. Es doloroso ver que cosas que creías que estaban bien, realmente son violencia.
¿Qué evoca para ti el 8 de marzo?
Tuve la oportunidad de ir a una marcha por el 8 de marzo antes de la pandemia, me sorprendió sentir tanta unión entre todas las mujeres, es algo que nunca había sentido, estar en un lugar y que en las calles se escuche una voz de puras mujeres, me hizo vibrar, somos muchas, muchas mujeres que queremos cambiar algo, ya no es una lucha individual, es una lucha colectiva.